Pan proteico sin horno 🥖🥖

Calentamos el yogur unos 30" en el microondas. Mezclamos todos los ingredientes en un bol hasta que nos quede una masa compacta. Para evitar que se nos pegue en los dedos, podemos ir echando la harina poco a poco y espolvorearnos una pizca en las manos. Truco: podemos añadirle frutos secos, AOVE, semillas o cualquier cosa que se nos ocurra para hacerlo más rico🤤 IMPORTANTE: Las medidas son orientativas, lo ideal es ir añadiendo la harina y la proteína al yogur hasta que la masa quede compacta, sin que se nos pegue en las manos. Ah, cuanta más proteína pongamos, más fácil será que se desmigue el pan luego,por eso yo recomiendo una relación máxima de 4-1 con respecto a la harina.

Dividimos la masa y hacemos formas. Lo más fácil es hacer bolitas y chafarlas un poco, dándoles forma de hamburguesa; pero también podemos hacerlas más finitas para que se nos quede una torta, alargadas tipo baguette...

Dejamos reposar unos 15-30 minutos. Este paso es opcional, pero ayuda a que fermente la levadura y el pan esté más esponjoso.

Calentamos una sartén y la pintamos con un chorrito muy fino de AOVE. Pasamos un papel por la superficie de la sartén para retirar el excedente de aceite.

Cuando la sartén esté bien caliente, colocamos nuestros panecillos, tapamos con una tapadera que cubra bien toda la sartén y dejamos el fuego en el mínimo. Dependiendo de la fuerza de nuestro fuego y del grosor de nuestros panecillos, el tiempo de cocción variará, pero suele rondar los 5-10 minutos por lado. Lo mejor es dejar que se tueste un lado y, una vez hecho, darle la vuelta. Así es más fácil de manejar y te evitas que se te quede seco por dentro.

TRUQUIS FINALES: Es posible que se nos quede un pelín crudito por dentro, pero no pasa nada: lo abrimos con un cuchillo y lo pasamos por la sartén o la tostadora. Una vez cocinado, el pan durará esponjoso uno o dos días, así que es mejor no hacer demasiado o congelar lo que no vayamos a comer en ese momento.