Masa de espelta para pizza.

Poner 100 mL de agua tíbia del grifo o calentarla unos segundos en el fuego para que quede a una temperatura ni caliente ni fría. Añadir los 6 gramos de levadura de panadería seca al agua, remover bien y dejar actuar durante 5-10 minutos.

Colocar en un bol los 170 gramos de harina de espelta, poner la cucharadita de sal y un chorrito de aceite. Hacer un "volcán" dejando un hoyo en el centro.

Pasados los 5/10 minutos verter el agua con la levadura disuelta en el hoyo del volcán de harina y remover hasta que todo se integre.

Cuando no queda agua ni harina seca, amasar durante unos 3 minutos (a máquina o con la mano).

Hacer una bola y dejarla en un bol tapado con un paño de cocina durante 2 horas.

A las 2 horas destapar (habrá aumentado de tamaño) y amasar para quitar el aire.

Estirar la masa sobre papel de hornear o una superficie con harina para que no se pegue.

*Opcional: BORDE RELLENO DE QUESO. En este caso, fundir el queso elegido en el microondas (se le puede añadir jalapeños, orégano,...) hasta que quede con una textura suficientemente derretida como para darle forma de churro alargado, que será lo que colocaremos en la parte externa del borde de la pizza. Para acabar solo queda envolver la tira de queso con la parte externa de la masa, con cuidado para que no se rompa (si no, el queso se saldrá en el horno).

Si no se quiere el borde relleno de queso, simplemente marcar el borde y pasar a rellenar la pizza al gusto!

Finalmente, cuando la pizza esté rellenada, se pone en el horno precalentado a unos 180 grados durante 15/20 minutos.