Tortilla con almidón resistente.

El día anterior cocemos las patatas con su piel unos 20 minutos. Hechas se sacan de la olla y se dejan templar antes de meterlas en el frigorífico.

Las patatas hechas el día anterior y dejadas enfriar en el frigorífico transforman su almidón en almidón resistente ( ya se ha hablado de ello aquí) que es mucho más saludable.

Se echa la mezcla en la sartén que está a fuego medio y se tapa unos 3 minutos dando toquecitos a la sartén de vez en cuando para facilitar que no se pegue la tortilla a la sartén.

Se da la vuelta a la tortilla y ya no se tapa, dejándola otros 3 minutos dándole toquecitos con el mango de vez en cuando.

Se vuelca la sartén sobre un plato y se deja templar.

Si os gusta más hecha por dentro se tapa la Tortilla con un plato grande (que no la aplaste) o con papel de aluminio mientras se templa.

Y a comer!! 😋

Se puede sustituir la cebolla por puerro y el pimiento verde por pimiento rojo o calabacín o ponerlos todos o ninguno jaja. Será por variantes. (La de la foto es de una que hice solo con cebolla)

Al día siguiente se hace la Tortilla....

Se pone el aceite a calentar, se echa el pimiento verde troceado, al ratito la cebolla troceada y el ajo entero.

Cuando está trasparente la cebolla se echa la patata en láminas.

Se deja sofreír un rato dando vueltas y se echa la sal.

Se retira el sofrito sobre un escurridor para que suelte el aceite y se retira el ajo (que le da un sabor muy peculiar... a quien le guste claro!).

Se baten los huevos y se echa un poco de sal.

Se echa el sofrito en los huevos batidos, se dan unas vueltas y se deja reposar para que las patatas se liguen un poco al huevo.

Mientras se pone una sartén al fuego con un chorrito de aceite que la impregne bien por dentro .