Sopas de ajo

Lo ideal es tener un caldo hecho casero de otro día, a base de cosas que no sirvan en casa. Por ejemplo: huesos, lo que sobra de la cebolla y el puerro, grasa del bacon, algún pimiento que se te haya quedado seco... Etc . Con cualquier cosa te queda un caldo riquísimo. Se puede hacer en el mismo momento (yo voy congelando todas esas cosas y cuando quiero lo uso). Se rehoga todo un poco con aceite en la cazuela antes de añadir el agua. Cuando esté tostadito echamos el agua y sal al gusto. Dejamos reposar

Picamos todo el ajo que queramos y lo aplastamos en el mortero. Añadimos en una cazuela y lo freímos un poco con aceite. Encima le añadimos un par de cucharadas de pimentón ocal ( o mezcla de picante y dulce ) y lo removemos. Con el fuego bajo para que no se queme. Dependiendo de si te gusta más picante o menos le puedes echar más o menos del pimentón que quieras

Añadimos el caldo previamente hecho encima del sofrito y removemos. Echar sal al gusto. Si el sabor del caldo está muy concentrado le añades más agua, hasta que quede como quieras. Si por el contrario está flojo de sabor puedes echar una pastilla concentrada de caldo o caldo de pollo o verduras de brick

Cortar en "sopinas" el pan duro y añadir en un cuenco con el caldo, al gusto