Yogurt griego sin yogurtera.

Poner la leche entera fresca (si no lo es no pasa nada, he usado leche entera de muchas marcas blancas o Puleva y sale muy bien también) en un cazo. Calentarla hasta que se vean las primeras burbujas. No hervirla, pues perderá las propiedades que hacen que el yogurt se cree.

Mientras se está calentando se le pone dos cucharadas soperas de leche en polvo y se remueve bien.

Apagar el fuego antes de que la leche hierva y dejarla reposar hasta que podamos meter el dedo(muy limpito😉) durante unos 6 segundos. Con un litro o litro y medio este proceso tardará unos 5 minutos aproximadamente. Ahora añadimos medio carton de nata para montar y mezclamos muy bien.

Añadimos un yogurt natural muy removido y lo mezclamos muy muy bien en la cacerola. En este caso se le añadió 190g(un tarro de potito mediano de yogurt hecho anteriormente) para un litro y medio.

Ponemos la mezcla en tarros de cristal(a poder ser) y tapamos con su tapadera o papel de aluminio.

Finalmente envolvemos los tarros en un paño de cocina y los guardamos en el horno, microondas, un baúl o en cualquier sitio donde no le de la luz y se mantenga la temperatura. En caso de meterlo en el horno, podremos calentarlo un poquito previamente. La cuestión es que nuestra mezcla se mantenga calentita durante toda la noche. He leído por ahí, que se puede mantener durante 24 horas antes de guardarlo en el frigorífico. Yo lo suelo dejar entre 10 y 14 horas. Cuanto más tiempo se deje, más cremoso saldrá. Por último lo metemos en el frigo y tenemos nuestro yogurt casero. Aunque me extendi mucho explicando, se tarda muy poquito y el sabor es exquisito.