Harcha marroquí

En un bol colocar la sémola fina.

Agregar unas gotas de esencia de vainilla, la levadura y una pizca de sal. Mezclar con las manos.

Añadir la mantequilla fundida y tibia.

Con una cuchara, mezclar hasta que la sémola quede con una consistencia de arena húmeda. Verter la leche de a poco, a medida que se va amasando.

Cuando la masa se sienta compacta, pero húmeda, dejar de amasar y dejar reposar durante 10 minutos.

Precalentar una sartén o plancha. Espolvorear la mesa de trabajo con la sémola gruesa. Volcar la masa allí. Con la ayuda de un rodillo, darle forma de disco, de un centímetro de espesor.

Con un cortante redondo, cortar porciones de masa. Reagrupar la masa sobrante y repetir hasta terminar. Espolvorear cada porción con sémola gruesa.

Cocinar en una plancha o sartén a fuego suave durante cinco minutos,volteando los panes a mitad de cocción. Deben quedar tostados.