Risotto de calabaza

Picar la cebolla muy pequeñita y pochar en una cazuela con aceite y sal. Cuando esté blandita y empiece a ser transparente añadir la calabaza partida en daditos pequeños y dorar otros 3-4 minutos.

Subir el fuego y echar el vaso de vino blanco, dejar que se evapore el alcohol y entonces volver a bajar a fuego a medio.

Echar el arroz y dejar que dore un poco con las verduras, un minuto o dos. A continuación echamos la primera tanda de caldo de verduras. El caldo de tiene que añadir caliente por lo que lo mejor es tener una cazuelita al lado con el caldo calentándose para cuando lo necesitemos. En esta primera ocasión echamos 2 vasos de caldo. Añadimos también sal y pimienta. Ir removiendo de vez en cuando.

Cuando el arroz vaya quedándose sin caldo (nunca que llegue a estar seco) volvemos a echar otro vaso de caldo caliente. El arroz hay que moverlo de vez en cuando y siempre cada vez que añadimos una tanda nueva de caldo. Este proceso lo repetiremos hasta que el arroz esté en su punto (blandito pero no pasado). Yo suelo tenerlo tras 3 tandas de caldo (contando con la primera en la que echamos 2 vasos). Para comprobar cómo va, probar el arroz tras la segunda o la tercera tanda de caldo.

Cuando el arroz esté listo (no tiene que quedar seco pero tampoco con caldo, más bien como húmedo) añadir el parmesano rallado y mover para que de derrita integrándose con el arroz.

Apagar el fuego, tapar y dejar reposar 5 minutos. No dejar más tiempo porque sino de pasa el arroz y queda pastoso como cemento. Espero que os guste!