Spaghetti integrales con tomate, champiñones y espinacas

Cortamos la cebolla en brunoise o en dados muy pequeños y la echamos a una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra ya caliente a fuego medio. * Si queréis añadir frutos secos a esta receta, que quedarían genial, os recomiendo echar unos piñones para que se tuesten a la par que la cebolla.

Laminamos los champiñones y los añadimos a la sartén cuando la cebolla esté casi lista (ya transparente).

Con los champiñones y la cebolla ya bien cocinados, incorporamos las espinacas, que se harán en apenas uno o dos minutos.

Salpimentamos al gusto.

En un vaso de batidora, metemos dos tomates a dados con una rama de perejil, sal y ajo en polvo. Batimos bien todo.

Añadimos el tomate triturado a la sartén a fuego medio y dejamos que espese un poco, removiendo de vez en cuando, pero dejándolo que se cocine.

Transcurridos unos 15-30 minutos, el tomate ya estará en su punto. Ya solo queda cocer la pasta integral. Se mete en un cazo u olla con agua hirviendo y sal y transcurridos unos 7-9 minutos estará lista. Os recomiendo que la dejéis al dente porque luego lo mezclaremos con el resto de ingredientes calientes.

Retirar la pasta del cazo u olla directamente con unas pinzas o un servidor de spaghetti hacia la sartén con la salsa y las verduras para conservar parte del agua de la cocción.

Mezclamos todo y ¡voilà! Veréis qué exquisitez de plato en tan poco tiempo. * Cuando emplatéis, podéis añadir queso. Yo creo que quedaría genial parmesano rallado.