Salsa de tomate casera

Yo suelo dejar madurar unos días los tomates para no tener que rectificar la acidez con azúcar.

Con los tomates bien maduros, los escaldo en agua hirviendo para pelarlos. Así la salsa tendrá un color más intenso.

En una olla con el AOVE doro unos ajos (sin el corazón) y pico la cebolla y la zanahoria y las pocho en ese mismo aceite. Echo la sal, pimienta y perijil.

Añado los tomates y dejo que se vayan pochando revolviendo continuamente para evitar que se peguen.

Lo dejo reduciendo unas tres o cuatro horas a fuego suave-medio, cuanto más tiempo está, más concentrada estará la salsa. Corregir el punto de sal y pimienta si fuera necesario.

Por último, paso la salsa por el chino (se puede hacer con la batidora y quedaría una salsa más anaranjada y fina) para eliminar las pepitas del tomate y triturar todos los ingredientes.

Yo en este punto suelo embotar la salsa, pero se puede utilizar ya para comer con pasta, albóndigas o lo que apetezca...