La que te hace llorar, la de siempre, la tradicional.

Primero pelamos las patatas, las lavamos y las cortamos en trozos finitos y pequeños ( yo utilizo patatas de mi huerta) que viva lo casero!

Ponemos un chorrito de aceite de oliva virgen en una sartén y ponemos a fuego medio/alto.

Este último paso ya es al gusto del consumidor. Dependerá de cómo Fe hecha nos guste la tortilla. Se suele decir que la buena la de verdad está poquito hecha, a mi me gusta así 😍

Sacamos nuestra tortilla de la sarten y ahora lo único que nos queda es cortar un trocito de pan y disfrutar! Que aproveche 😋

Cuando el aceite esté caliente introducimos la patata y las movemos para que se impregnen bien en el aceite y dejamos que se pinchen bien.

En un bol introducimos los huevos y batimos bien hasta que la mezcla sea homogénea ( si es posible utilizar huevos caseros, solo hay que ver el color y el sabor que le aportaremos a nuestra tortilla )

Cuando las patatas estén bien cocidas con la ayuda de una espumadera sácamos las patatas y las añadimos a los huevos batidos, chafamos un poco con un tenedor, esto le dará esponjosidad a nuestra tortilla. Ni

Es el momento de salar al gusto la mezcla

Calentamos una gotita de aceite de oliva virgen en una sartén antiadherente ( muy importante esto)

Cuando el aceite esté bien caliente introducimos nuestra mezcla y con la ayuda de una cuchara de madera vamos despegando un poco los bordes de nuestra tortilla

Cuando veamos que el huevo está suficiente cuajado en la base comienza la magia, vamos a darle la vuelta a nuestra tortilla.

Le damos la vuelta a la tortilla a la tortilla con mucho cuidado y delicadeza y cocinamos por el otro lado y ayudamos a nuestra tortilla por los laterales con la cuchara de madera.